Lactancia Materna y Reflujo Gastroesofágico

Por: Ana M. Parrilla, MD, MPH FABM

Los/las bebés con reflujo pueden ser un reto para cualquier mamá. El reflujo gastroesofágico ocurre cuando los ácidos del estómago suben hacia el esófago y causan dolor al bebé. Todos/as los/as bebés recién nacidos/as tienen un poco de reflujo pero hay algunos en que los síntomas son más severos.  Los/as bebés con reflujo gastroesofágico pueden estar quisquillosos y llorar de tal manera que parecen tener cólicos. Muchos de los/as bebés que en generaciones anteriores se tildaban de que tenían cólicos en realidad lo que tenían era reflujo.  Muchas veces están inconsolables durante estos episodios y causa mucha frustración en los padres el no poder consolarlo/a. No es hasta  años recientes que los médicos han comenzado a apreciar este problema como fuente de angustia en el/la bebé.

El reflujo gastroesofágico (GER por sus siglas en inglés) no es siempre fácil de diagnosticar. Algunos bebés con GER vomitan mucho o echan “buches”. En otros/as el líquido que regurgitan no sube todo el esófago y no vomitan. Algunos de los signos de reflujo en un/a bebé son:

  • dolor tipo cólico que comienza poco tiempo después de tomar el pecho,
  • despertarse de noche con llanto que se alivia mamando (nuestras abuelas usaban el término “tiene canina” para describir estos/as bebés),
  • vomitar durante, o poco después de, las alimentaciones (aunque no todos/as los/as bebés con  GER vomitan y no todos/as los/as bebés que vomitan mucho tienen reflujo),
  • infecciones respiratorias frecuentes.

Los/as bebés que se amamantan tienen una probabilidad menor de desarrollar reflujo que los/as infantes alimentados/as con fórmula y cuando lo tienen los síntomas son menos severos. Como la leche materna se digiere más rápidamente tiene menos oportunidad de regurgitarse. El pediatra puede diagnosticar el GER basado en los signos y síntomas y/u ordenar alguna prueba adicional. Se pueden usar en estos casos antiácidos o medicamentos que aumenten el vaciado gástrico. Se debe continuar amamantando porque esto ayudará al/ a la bebé. Contrario a lo que se recomienda cuando se alimenta a un/a bebé con fórmula los/as bebés amamantados que tienen reflujo deben dejarse en el pecho todo el tiempo que quieran. La onda peristáltica que se produce cuando se está amamantando, aún de un pecho vacío, evita que ocurra el reflujo. No es necesario sacarse leche y mezclarla con cereal o vegetales; de hecho, esto puede afectar la lactancia. Esto se hace  en los/as bebés alimentados/as con fórmula para espesar la leche pero no es necesario en los/as bebés lactados/as por lo rápido que se digiere la leche materna.

Se debe cargar mucho al/ a la bebé en posición vertical, sobre todo después de darle el pecho. Hay que elevar su cunita unas pulgadas y si duerme con los padres es recomendable que se eleve la cama de éstos. Si  su pediatra le receta algún medicamento para aliviar los síntomas no se debe vacilar en dárselo.

Algunas veces se asocia el llanto, el reflujo o los cólicos del/ de la bebé a alergias por alimentos. Esto es un error pues en estos casos el dolor no está asociado al síndrome cólicos ni a al reflujo sino a una colitis alérgica. La experiencia clínica es que las alergias a alimentos de la dieta de la madre vienen acompañados por más de un síntoma además del llanto, tales como erupción en los cachetes o las nalguitas, mocos o diarreas, y hasta se presentan con estrías de sangre en la excreta o con evacuaciones  sanguinolentas. Algunas proteínas pueden pasar a la leche materna y provocar una reacción alérgica en el infante. Los alimentos más comunes incluyen la leche, las nueces, la mantequilla de maní, chocolate, huevos y algunas vitaminas sintéticas. En estos casos la recomendación de manejo es una dieta de eliminación pero en el caso del reflujo es completamente innecesario.

El reflujo es una condición que va desapareciendo durante los primeros seis meses de vida de tu bebé; ten paciencia. Descansa cuando tu bebé descansa y pide ayuda a tus familiares y amigos. Este periodo va a pasar y te sentirás muy feliz de haber podido ayudar a tu bebé a superarlo con tu amor y dedicación.